¿Quién era el jefe del grupo terrorista Hezbolá?

Hassan Nasrallah, quien sirvió como Secretario General de Hezbolá desde el 16 de febrero de 1992, promovió una política abiertamente hostil hacia el Estado de Israel, buscando su destrucción.

Bajo su liderazgo, Hezbolá creció hasta contar con aproximadamente 100,000 miembros, principalmente combatientes. La organización desarrolló un arsenal significativo mediante el contrabando de armas hacia el Líbano y la producción interna, que incluye misiles balísticos, cohetes, drones y misiles antitanque.

Desde su llegada al poder, Nasrallah fue responsable de varios ataques notorios. En 1992, ordenó un atentado con coche bomba junto a la Embajada de Israel en Argentina, que dejó 29 muertos. En 1994, Hezbolá, en colaboración con Irán, perpetró el ataque contra la AMIA en Buenos Aires, causando la muerte de aproximadamente 80 personas.

La retirada de las fuerzas de defensa de Israel del Líbano en 2000 marcó un nuevo capítulo para Hezbolá. La organización atacó patrullas israelíes y secuestró soldados, desencadenando la Segunda Guerra del Líbano en 2006. Durante este conflicto, Hezbolá lanzó cohetes hacia poblaciones civiles, resultando en la muerte de 44 civiles y alrededor de 2,000 heridos, así como la muerte de 121 soldados israelíes.

La implicación de Hezbolá en el asesinato del Primer Ministro libanés Rafik Hariri en 2005 y la colaboración en ataques contra fuerzas estadounidenses en Irak a mediados de la década de 2000 son ejemplos de la violencia vinculada a su liderazgo.

Desde 2011, Hezbolá apoyó al régimen de Bashar al-Assad en Siria, enviando miles de combatientes para combatir a las fuerzas opositoras, lo que resultó en un alto costo humano, incluyendo cerca de 600,000 muertos.

En 2020, una explosión devastadora en el puerto de Beirut, que mató a 218 personas, fue atribuida a la posesión de nitrato de amonio por parte de Hezbolá, adquirido de las “Guardias Revolucionarias” de Irán.

Nasrallah es visto en Occidente como un líder terrorista peligroso, y muchos países lo consideran responsable de las actividades terroristas de Hezbolá. Su arsenal, que incluye cohetes de diversos alcances y drones, ha sido en gran parte abastecido por Irán.

Desde el 8 de octubre de 2023, Hezbolá lanzó una serie de ataques indiscriminados contra Israel, utilizando aproximadamente 9,300 cohetes, misiles antitanque y drones. Nasrallah se ha negado a implementar la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, manteniendo su posición de desafío frente a Israel.

La muerte de Nasrallah el 27 de septiembre de 2024, aunque significativa, no marca el fin de Hezbolá, ya que la organización tiene un sucesor preparado para continuar su legado y su influencia en la política de Oriente Medio.