Desfilar, arroparse con una bandera o escuchar “Patria” de Rubén Blades no son, por sí mismos, actos patrióticos; lo que realmente define el patriotismo es ser un buen ciudadano y actuar con civismo.
Cada noviembre, los panameños sienten un renovado fervor por la patria, pero poco de este sentir logra trascender y concretarse en algo tangible.
Solo tomemos, por ejemplo, al finalizar un desfile es común ver cómo se dejan atrás toneladas de basura, que luego deben recoger los trabajadores de Aseo. Todo por la patria, menos recoger su propia basura.
No se puede generalizar, pero la cantidad de desechos...