Opinión

Inseguridad y violencia en las calles

21 de noviembre de 2024

La creciente inseguridad y los altos índices de criminalidad en áreas urbanas, especialmente en el distrito de San Miguelito y en provincias, son preocupaciones para muchos ciudadanos.

Deberíamos analizar cómo la violencia afecta la calidad de vida, la economía y la percepción de seguridad. La creciente ola de criminalidad en el país no es un problema aislado, sino una cuestión estructural que requiere una reflexión profunda sobre las subyacentes y, sobre todo las búsquedas de soluciones efectivas.

Sin embargo, la violencia no se puede reducir a un simple problema de seguridad pública. Es una manifestación de las profundas desigualdades sociales que persisten en Panamá. La falta de oportunidades para los jóvenes, la pobreza estructural y la desconfianza en las instituciones son factores que alimentan la desesperación y la marginalidad. La violencia, en muchos casos, se convierte en una salida para aquellos que no encuentran otra forma de hacerse escuchar o mejorar su calidad de vida.

Es urgente que el país repiense su enfoque en la seguridad. No basta con desplegar más policías o endurecer las penas.