CSS: ¿Qué quieren los sectores populares?
Líderes de las agrupaciones populares aseguran que se mantendrán en las mesas de conversación; sin embargo, no aceptarán ningún proyecto de reformas que no sea debidamente consensuado. Se preparan para movilizarse
Representantes de gremios populares y magisteriales manifestaron su posición frente a las conversaciones que lidera el Ejecutivo para elaborar el proyecto de reformas de la Caja de Seguro Social (CSS).
Aseguran que esto “no es un diálogo”, la metodología ha sido impuesta y no aceptarán medidas paramétricas, ni ningún documento que no se logre a través del consenso.
Los gremios se preparan para realizar una marcha el próximo 17 de octubre, para manifestar su rechazo ante un posible aumento de la edad de jubilación, aumento de cuotas, privatización de la CSS y otras medidas en las que están en desacuerdo.
Luis Sánchez, del Frente de Acción Magisterial, indicó que “en la mesa no se está acordando nada, solamente escuchar y no se puede debatir nada. Para poder solicitar datos de la CSS o los emitidos por la OIT hay que hacer un acuerdo con el Ejecutivos para poder tener acceso violando la ley de Transparencia”.
Alfredo Graell, secretario general de la Central Nacional de Trabajadores (CNTP), señaló que “rechazamos todas esas formas de medidas paramétricas y de pilares y no lo vamos a consensuar. Nosotros apoyamos retomar el 100% al sistema solidario”.
“No aceptamos disfraces de privatizaciones como la tercerización, menos manejos de inventarios, custodios de medicamentos y manejos de fondo por empresas extrajeras. Rechazamos las administradoras de fondos de pensiones y entregar servicios a hospitales privados”.
“Ha sido una conversación decidida desde el gobierno, no cuenta con la metodología adecuada y no hay igualdad en términos de discusión. No es un diálogo... podemos concluir que el gobierno tiene ya una decisión tomada y está buscando legitimarla”.
“Una mesa de conversación ha quedado en una mesa de escuchar nada más. Hay un descontento enorme con la metodología, no es democrática, es de imposición. Al final, el gobierno va a presentar una propuesta cualquier sorpresa nos podemos llevar”.
“Nosotros no estamos dispuestos a dar más aportes. Un diálogo serio es aquel en que las partes proponen y se puede llegar un consenso al final, pero una conversación no tiene pie, ni cabeza. Nosotros proponemos volver al sistema solidario”.
“Esto no puede llevarse de esta forma, tenemos derecho a que se nos escuche y que nuestras propuestas sean debatidas y se lleven adelante también dentro del proyecto que ellos pretenden presentar. Un diálogo no puede ser eterno, pero tampoco en los tiempo que pretenden”.
“Definir los tiempos era importante, porque un mes y días para elaborar una propuesta con un problema tan importante es muy poco. Nos mantendremos allí para que haya una propuesta cónsona con la realidad que enfrentan los trabajadores”.