Más que tecnología es mentalidad

En un mundo impulsado por la urgencia digital, muchas organizaciones aún tropiezan con desafíos estructurales que trascienden lo tecnológico. No se trata solo de software complejo o presupuestos limitados. El verdadero reto de la transformación digital está en la cultura y en cómo una empresa asume el cambio como parte de su ADN.

La falta de una estrategia clara, la ausencia de habilidades tecnológicas, el temor a lo nuevo y la resistencia al cambio son síntomas de una mentalidad anclada al pasado. A eso se suma una estructura organizacional en silos que impide la colaboración y la velocidad en la toma de decisiones.

Las compañías que lideran esta nueva era entienden que digitalizarse no es incorporar herramientas, sino transformar procesos, equipos y propósito. Y para lograrlo, se requiere algo más difícil que adquirir tecnología: rediseñar la forma en que se piensa y se actúa.

Medir el retorno de la inversión en transformación digital implica ver más allá del balance. De lo que se trata de es de entender si la organización está preparada para evolucionar al ritmo de sus clientes. La tecnología es el vehículo; la mentalidad, el verdadero motor.

* Consultor en Transformación Digital.