Producir lo que consumimos

Hasta donde mi memoria histórica me lo permite, solo en los tiempos de Rubén Darío Paredes como ministro de Agricultura y Desarrollo (1975-1978), cuando popularizó la frase de “producir lo que consumimos”, el sector agropecuario fue potenciado con responsabilidad en la agenda de gobierno, en ese entonces el denominado “proceso revolucionario”.

Y hay que señalar que durante los dos últimos quinquenios gubernamentales nuestra gente que suda su sangre en el campo, recibió un duro golpe que acabó prácticamente con la cadena alimentaria por un lado, y por el otro, desalentó al sector productivo en la tarea de ser eficiente.

Una vergüenza todo lo sucedido en ese lapso. Se desvirtuó la labor del Instituto de Mercadeo Agropecuario permitiendo que unos bellacos, que todos saben el nombre de los mismos, se dedicaran a importar productos de toda clase para competir con los nuestros, en un claro atentado contra la verdadera misión de esta entidad creada en 1975.

Vale apuntar que el Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA) se inició con el propósito de “apoyar al productor nacional en la comercialización y mercadeo de sus productos”.

Fue entonces cuando nacieron las famosas ferias libres. Se aplicaba un precio mínimo para impedir que los intermediarios abusaran de los productores. Así como el IMA, el proceso liderizado por Omar Torrijos puso en función a otras entidades como el Banco de Desarrollo Agropecuario (1973), el IDIAP (1975) y el ISA (1975).

Un conjunto de entidades orientadas a promover la calidad, financiamiento y protección de las inversiones de los productores agrícolas y pecuarios.

Hoy vemos con buenos ojos los primeros pasos dados por el nuevo gobierno de Laurentino Cortizo, que a través de su ministro del MIDA, Augusto Valderrama, está devolviéndole la confianza a este sector.

Todo esto en menos de 30 días de gestión, lo cual debe traducirse, sin temor alguno, en lograr que en corto tiempo podamos incrementar la producción y ser menos dependientes de las importaciones.

Euclides Corro
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* El autor es periodista.