Motín carcelario deja dos presos muertos y cuatro heridos en Ecuador

Al menos dos presos murieron y otros cuatro resultaron heridos en el motín registrado el miércoles en una cárcel del puerto ecuatoriano de Guayaquil, de la que se fugó hace meses un temido capo criminal, informaron el jueves autoridades.

"Hasta el día de hoy tenemos como resultado de eso (la revuelta), dos personas privadas de libertad fallecidos y cuatro heridos", dijo a la prensa el general Víctor Herrera, jefe policial en Guayaquil (suroeste).

Previamente, el viceministro de Seguridad, Lyonel Calderón, señaló al canal Teleamazonas que el motín había dejado un muerto y cuatro heridos.

"Tenemos que esperar que concluya la revisión completa de todo el centro penitenciario", agregó, lo cual incluye "un control de armas, municiones y explosivos". en la que hay unos 4.400 reos.

Calderón insistió en que la revuelta estaba "completamente controlada" en la cárcel Regional de Guayaquil (suroeste), de la cual escapó Adolfo 'Fito' Macías, líder de la organización Los Choneros, una de las principales del país.

Su fuga detectada a inicios de enero desató una guerra entre narcotraficantes y el Estado que dejó una veintena de muertos y llevó al gobierno a decretar el estado de excepción, extendido hasta abril, además de militarizar las cárceles y las calles.

"Hemos retomado el control del Centro de Rehabilitación Social 4", había indicado el presidente Daniel Noboa en la red X la noche del miércoles, destacando que se evitó "una posible escalada".

- Bases para la seguridad -

Periodistas de la AFP escucharon detonaciones y vieron llamas en el interior de la prisión, una de las cuatro que conforman un gran complejo penitenciario de Guayaquil que ha sido escenario de matanzas entre reos de grupos rivales.

El jueves temprano, unos 200 familiares de los reos quemaron neumáticos para interrumpir momentáneamente la circulación de vehículos a las afueras del centro en protesta por supuestos malos tratos de los militares a los presos, lo que habría ocasionado la rebelión.

Las cárceles ecuatorianas son centro de operaciones de bandas narcotraficantes vinculadas a carteles de Colombia y México. Desde 2021 los constantes enfrentamientos entre estos grupos criminales han dejado más de 460 muertos.

Por iniciativa del mandatario, en el cargo desde noviembre pasado, los ecuatorianos acudirán a las urnas el 21 de abril para resolver en referendo popular medidas para afrontar la situación, como si los militares deben apoyar a los policías para combatir la delincuencia sin un estado de excepción, autorizar la extradición de ecuatorianos relacionados con el crimen organizado y aumentar las penas de terrorismo y narcotráfico.

En un acto de entrega de viviendas en la localidad de Penipe (sur andino), Noboa manifestó que el referendo "permitirá cimentar las bases de la seguridad, la paz y el desarrollo".

Tras la fuga de "Fito", quien desde 2011 cumplía una condena a 34 años por delincuencia organizada, narcotráfico y asesinato, las bandas criminales protagonizaron en enero una violenta arremetida con saldo de una veintena de muertos, ataques a la prensa, explosiones y más de 200 secuestros temporales en cárceles y calles.

- Militares en las calles -

Ante la crisis de seguridad, Noboa decretó el estado de excepción que le permite movilizar a las Fuerzas Armadas, con toques de queda nocturnos aún vigentes en Quito y Guayaquil.

El mandatario también declaró a la nación en conflicto armado interno y tildó a una veintena de agrupaciones de "terroristas" y "beligerantes", como medida para doblegarlas.

Ubicado entre Colombia y Perú, los mayores productores de cocaína del mundo, Ecuador se convirtió hace años un centro logístico para el envío de droga a Estados Unidos y Europa.

Las bandas se disputan a sangre y fuego rutas para el tráfico, lo que elevó la tasa de homicidios de 6 por cada 100.000 habitantes en 2018 al récord de 46 en 2023.

El gobierno sostiene que su ofensiva contra el crimen redujo los asesinatos de 28 diarios en la primera semana de enero a 11 después de dos semanas.

"Combatimos a los narcoterroristas que otros solaparon con su inoperancia", indicó el gobernante, apuntando que las Fuerzas Armadas "están en las calles y necesitamos que continúen apoyando en el control de la seguridad".

En los últimos días se dio un rebrote de la violencia, según analistas, al ser asesinada a disparos la alcaldesa más joven de Ecuador junto a un colaborador.

También un soldado murió y otros tres fueron heridos en una emboscada a una patrulla militar y la policía debió evacuar un estadio donde se disputaba un partido de fútbol profesional por una amenaza de bomba en los estacionamientos.