Cultura

El incienso y su significado en la Semana Mayor

04 de abril de 2023

A nivel litúrgico el incienso es considerado un perfume que simboliza la elevación de las oraciones a Dios durante las grandes solemnidades, como la Semana Santa. Esta idea se desprende, según el padre Manuel Ríos Yuil, de las sagradas escrituras (Salmo 141.2): “Suba mi oración delante de ti como el incienso, el don de mis manos como la ofrenda de la tarde”.

Este material compuesto de hierbas y resinas se empezó a emplear en Oriente para agradar a las divinidades.

“Los hay de todo tipo, de rosa, jazmín, lavanda, mirra, e incluso mezclas; pero no hay uno específico para cada celebración...”, explicó.

¿Purificación?

Suele colocarse en un mechero conocido como turíbulo o incensario, alrededor del altar, frente al santísimo, cerca del santo del día o de la iglesia.

El rector de la Catedral Metropolitana también comentó que se inciensa al sacerdote y a la comunidad asistente. “Cabe aclarar que esto no tiene un sentido purificador, sino de introducción de nuestra oración a Dios”.

Carlos Vilanova, padre de la Basílica Menor Don Bosco, coincidió en este aspecto y reafirmó que es una manera física de representar las plegarias que con corazón y espíritu se hacen.

La quema de incienso tiene, además, un fin esotérico para algunos creyentes.

“Sirve para purificar, elevar el espíritu y llamar a los buenos espíritus al hogar. Puede entenderse como una especie de pacto para cambiar, pues eso es lo que se busca al encenderlos luego de hablar con Dios y con uno mismo”, explicó la astróloga Kazandra.

$!El incienso y su significado en la Semana Mayor

La iglesia no dice que incienses en casa, pero en Panamá existe esa traición; eso tiene un fin más esotérico. En realidad el incienso se percibe como el canal que lleva nuestras oraciones a Dios, durante las solemnidades especiales.

El incienso se usa muchísimo en Semana Santa, por ejemplo, el Viernes Santo se quema para alejar a los malos espíritus cuando se siente una muy mala energía o desde las 3:00 p.m., para guardarnos mientras Jesús resucita. Es protector.