'Mi amor desgraciado', reflexión de maternidad

El título “Mi amor desgraciado” (Siruela) puede confundirse con una novela romántica o con un libro de autoayuda, de esos que abundan en estos tiempos.

Sin embargo, Lola López Mondéjar (Murcia, 1958) se propone en esta historia de ficción razonar sobre los sentimientos y emociones de las mujeres adultas.

La autora, quien también es psicoanalista, presenta en sus páginas los siguientes cuestionamientos: ¿son la pasión sexual y el amor materno sentimientos incompatibles?, ¿quieren siempre las madres a sus hijos con una entrega total?, ¿existe en realidad tal entrega o hay un límite?

Es por ello que la novela se apoya en dos elementos y desde ahí parten los sucesos. En el 2002, en el pueblo murciano de Santomera habitó el horror:

una mujer había estrangulado a sus dos hijos, de seis y cuatro años, con el cable del teléfono. Y el otro pilar recuerda la tragedia griega, Medea mata a sus hijos tras ser abandonada por Jasón.

El libro explora el mundo interior de sus personajes. Dos tipos distintos de mujer que tienen algo en común —el hastío que les produce ser madres— se encuentran en París y tratan de apoyarse. Las protagonistas invitan a acompañarlas en la necesidad de encontrarnos a nosotros.

De esta manera, “Mi amor desgraciado” cobra vigencia en una época donde la mujer pugna por la igualdad. La novela intenta mostrar otras aristas del mito del amor maternal, y cómo se reprimen deseos que ayudarían al mejor desenvolvimiento de la familia y la sociedad.

Leyles Rubio León
Escritor
[email protected]
@checherule