MADRID. Google evitó que a lo largo del año pasado 2,28 millones de aplicaciones llegasen a su tienda oficial Play Store por infringir las políticas de este servicio, algo que consiguió con las diferentes funciones de seguridad con las que trabaja.
La compañía busca ofrecer una experiencia “de fiar” en su servicio, lo que actualmente considera su “principal prioridad”, según ha señalado en un comunicado. Para ello, toma una serie de medidas, que se corresponden con las siglas SAFE (Seguridad), que comienzan con la necesidad de salvaguardar a los usuarios para ayudarlos a descubrir aplicaciones de...